Paciente varón de 31 años, sin antecedentes de interés salvo un viaje reciente de vacaciones a Tanzania. Dos días antes de su regreso se despertó con intenso prurito en el pie derecho. Una semana después comenzó a notar "como si se moviera algo bajo la piel", lo que se siguió rápidamente de la aparición de una línea eritematosa en el dorso del pie y edema. Negaba la existencia de síntomas generales y no se observaron alteraciones analíticas. Consultó en los Servicios de Urgencias, en donde al apreciarle lesiones serpinginosas, eritematosas, y palpables con vesículas (figura 1), le prescribieron mebendazol.
Posteriormente fue remitido a la Unidad de Enfermedades Infecciosas del Hospital Virgen de la Victoria de Málaga, iniciándose tratamiento con ivermectina a dosis única de 12 mg.
La evolución se muestra en la figura 2 (14º día) y 3 (20º día).